lunes, 24 de noviembre de 2008

23/11/08


Te haz ganado el odio de Antonio y su ejercito.

Las armas en su lugar, los codos bien afilados, por favor tomen sus pertenencias, mochilas, botiquines y sobre todo sus provisiones de alimento, hoy nos vamos a la guerra.

Recuerden siempre, se los suplico, no estamos aquí, todos de pié en formación, para ir a caer en el suelo enemigo y llorar cómo señoritas. No hemos nacido para no hacer nada, estamos aquí con un solo objetivo, destruir. Por eso compañeros míos, no olviden sus armas, que sean cómo sus manos, sus salvavidas, sus tubos de oxigeno, sus almas.

Créanme, fieles míos, esto no seria así de no ser por las decisiones y los silencios de nuestro enemigo, la indiferencia, la crueldad y las malas intenciones. Recuerden por favor, hemos sido traicionados, nos robaron lo único que nos mantenía felices, nos robaron, recuérdenlo, el que una vez fue nuestro amigo nos traicionó.

Despacio hermanos, vayan con cuidado por sobre las piedras, avances sigilosamente, agudicen la vista, que el que una vez cayó está condenado a caer otra vez. Que el odio los motive, no los consuma, es un arma de doble filo, no es necesario describir más.

Antonio aun no está aquí, pero pronto llegará y el infierno caerá sobre todo aquel que quiso destruirnos, así se dijo, así será. Mientras el piano suene en la profundidad de nuestras conciencias, nada habrá que temer, estamos dando todo por un bien común.

Los llamo a la guerra por que no hay más escapatoria, nadie es feliz esperando, el tiempo ya no es un factor que influya positivamente entre nosotros, es momento de actuar, por que cada segundo que pasa el pozo se llena más de aquella toxica sustancia.

Piensen en sus hijos violados, en sus mujeres mutiladas, en sus casas destruidas, en sus heridas, piensen en el dolor, lo siento, no existen más soluciones.

Les prometo el paraíso.





Existen cosas terribles en este mundo, cosas que no se miden con sangre, cosas que a mi no me han tocado vivir y que quizás no me toquen vivirlas jamás, pero el horror es personal, los parámetros no se comparten, soy cómo soy y nadie puede intervenir en eso, no cómo una piedra, pero si como un caparazón que protege mi esencia.

Ve a dormir.

domingo, 9 de noviembre de 2008

09/11/08



Receso.

No se de que escribir en un momento como este.
¿Que siento?
Nada, no siento nada, es tan extraño, solo se que algo hay, algo que no entiendo que es, ni porqué es, hay un leve cosquilleo en mi estomago, como electricidad, pero casi imperceptible, es una fuerza que algo quiere decir o quizás algo contiene, hay algo atrapado en mi, quizás sea una enfermedad, quizás sean las ganas de salir corriendo que no he podido liberar, las ganas de llorar, hay veces que tengo ganas de llorar, pero es imposible liberarlo, no se cómo llorar y no es que sea una persona fria y sin sentimientos, pero es una sensación que queda tan agena.
Hoy solo tengo ganas de escribir, escuchando música, canciones que quizás alguna vez inspiraron buenos momentos y fueron complices de actos que quizás quiciera olvidar. Tengo ganas de mirar mi techo y que sea de un color diferente, mirar por la ventana y que aquellas rejas que supuestamente me protejen de los mal intencioinados no esten y que de un salto pueda estar en el patio, respirar aire fresco, tengo tantas ganas de mirar el mar, de escuchar el ruido de las olas cuando chocan con las piedras, o esa efervecencia cuando la espuma salada abraza los pies, hace casi un año que no veo el mar, antes de eso no fueron más de cinco años, no es una necesidad, es un lujo.
Hoy tengo ganas de matar, como de costumbre, ganas de ver el dolor ageno como intercambio del egoismo que vivimos todos los días, hay gente que no merece vivir, gente con bendas en los ojos y audifonos en los oidos, escuchan canciones estupidas que solo hablan de los lujos de la vida, de sexo, de que las niñas deben ser cosas asi como "fashion" o "top", que imbecilidad.
Eso fue raro, una critica exterior, no estoy acostumbrado a escribir cosas asi aqui, de hecho, hace un par de semanas que siento que todo es demasiado deforme, como una ameba, sin sentido personal, solo seguir el camino que estamos predispuestos a caminar, sin mayor novedad interior, por fuera es facil demostrar que todo está bien, que todo anda perfecto, que estoy agradecido de la vida, que estoy satisfecho con lo que hago y conforme tambien con lo que no hago, pero por dentro las cosas no son asi, hay un vacio terrible que aun no entiendo, por que sacar un tumor no es la solucion perfecta, siempre queda un vacio, siempre queda un espacio desocupado y eso no es natural, nada de esto es natural y como bueno ser humano, como lo imbecil que podemos llegar a ser aun conservo las esperanzas de que todo volverá a estar bien, como siempre con la eterna ambicion de "luchamos por lo que queremos y queremos a aquello por lo que luchamos", le da un valor espacial, es la entrega la que lo hace importante y es aun más importante cuando sentimos que el esfuerzo no es en vano, tiempo, las cosas serán como tengan que ser, dormiré por mientras, quizás despierte en mejores condiciones.
Es que no nos damos cuenta como cambiamos, no nos damos cuenta que nuestra esencia es fragil y que casi inconscientemente la modificamos por cualquier cosa, por problemas que contenemos, por cosas que no decimos, por ansiedad, por intranquilidad, por insatisfaccion, casi por cualquier cosa. Es tan facil cambiar, mi idea es recuperar... volver a la esencia, a mi esencia.
tu esencia...