viernes, 21 de marzo de 2008

21-03-08


5 caracteres restantes.

Algunas horas atrás logre abrir los ojos después de algunos segundos de sueño, mi cara estuvo expuesta al sol por algunos minutos mientras yo estaba allí tirado pseudo-inconsciente. El teléfono no paraba de sonar, apenas se cortaba volvía a sonar, como si un viejo gordo y calvo estuviese gritando del otro lado. Como siempre logre pensar en la salida más cómoda, no moví un musculo para atender. Aproveche esos segundos de entre sueños para manipular ideas e imágenes, por que al menos yo, en esa etapa del sueño, puedo modificar a gusto todo lo que pasa por mi cabeza. Jugar con las ideas es una especie de hobby para mi, cerrar los ojos y viajar.
El teléfono al fin dejó de sonar, mis oídos se relajaron y me volví a entregar a la orquesta. En mi computador sonaba toda clase de música, yo tenia en una mano un control remoto y con el simple movimiento de un dedo las canciones iban cambiando. Por que soy flojo y cómodo, mi madre me reta por que dejo la bandeja tirada en cualquier lugar y que no soy capaz de dejar mi plato limpio, que no soy capaz de recoger mi ropa del suelo, que no soy capaz de sacudir el polvo, que no soy capaz de mover un dedo por la casa, que no soy capaz de mover un dedo por apoyarla a ella, notese, todo esto con ese típico tono chillón de mamá.
Abrí los ojos, los despegué, mi boca estaba seca, seguramente lo que alcance a dormir lo hice con la boca abierta, muy poco practico, bostece, puse mis pies en el suelo y me digné a seguir haciendo nada por la vida.

No hay comentarios: